Eneatipo 1- Mufasa: El perfeccionista
Es un rey con valores de perfección, sentido de la responsabilidad, obediencia y disciplina que con su sabiduría dirige y mantiene el equilibrio en su reino. Transmite prudencia y responsabilidad a su hijo Simba, valores que un futuro rey debería tener.
Quiere obrar bien y que los demás también lo hagan, pero si ve errores en los otros manifiesta mucha ira y enfado. Cree que es importante reconocer cuando se equivoca y espera que el resto haga lo mismo para poder corregir los errores.
Su gran sentido de la responsabilidad y disciplina hace que se asegure de que todo funciona correctamente en su reino.
Los eneatipos 1 son personas que se rigen siempre a favor de las normas o estándares. Pueden ser objetivos, equilibrados y moralmente heroicos o represivos y perfeccionistas. Los ideales de perfección, control, dominancia, crítica y disciplina son fundamentales en este eneatipo.
Eneatipo 2- Nala: El ayudador
Distinguimos 3 tipos:
- Sanos. Muestran empatía y compasión, manifestando una gran sensibilidad por los demás. Se ponen en lugar de otros, son muy cariñosos y se preocupan por las necesidades ajenas. El servicio al resto es importante, sin embargo, también consideran esencial cuidar de sí mismos. Del mismo modo, son muy entregados, generosos y serviciales.
- Promedio. Navegan por el mundo con aires de superioridad, llegándose a mostrar arrogantes. Esperan reconocimiento constante por sus actos. En ocasiones pueden convertirse en hipocondríacos o desempeñar el papel de mártires debido a sus buenas obras a favor de los demás.
- Malsanos. Si se sienten poco apreciados, pueden convertirse en personas agresivas y egocéntricas.
Como demuestra Nala en la película, es un personaje que se preocupa por los otros, sobre todo por Simba, y es complaciente y generosa. Los dos están atentos a las necesidades de los demás y les cuesta trabajo ver las suyas. Aunque Nala también demuestra tener mucho orgullo al creer que los demás tendrían que estar agradecidos por todo lo que hace por ellos.
Eneatipo 3- Simba: El triunfador
Simba huye al perder a su padre. Nala y Rafiki van a buscarle porque es el único líder que puede salvar el reino. A su llegada terminan los problemas y consigue tener éxito. Su personaje es fundamental para la historia porque es el único que consigue que la admiración de todos, es el héroe de la historia.
A lo largo de la película, Simba busca el reconocimiento de los demás para cumplir con sus expectativas y dar una imagen de éxito. Quiere que todos sepan su valía personal.
Las personas que pertenecen a este eneatipo suelen ser competitivas en trabajos y habilidades porque buscan ser los mejores. Tienen miedo a fracasar y que los demás los vean como poco exitosos, lo que demuestra su preocupación por la opinión del resto sobre ellos.
Se identifican menos con los papeles de utilidad interpersonal y más con los de éxito y productividad. Suelen esperar ser amados por sus actos y menos por su personalidad. En las relaciones íntimas destacan por ocultar su verdadera personalidad por miedo a no ser aceptados.
Eneatipo 4- Sarabi: El romántico
La madre de Simba es muy cariñosa y cree que su hijo será el que salve al reino del control de Scar.
Son muy sensibles, creativos, dramáticos, intensos, emotivos y sinceros. Les gusta tomar la posición de víctima y ser demandantes. Muchas veces tienden a pensar que los demás no les van a comprender y se sienten diferentes o especiales.
La autoexpresión y la búsqueda del conocimiento de sí mismo son las prioridades más elevadas para las personas con este estilo.
También pueden ser quejosos, críticos y envidiosos. La envidia nace de su comparación constante con otras personas y sufren al creer que los demás tienen cualidades que a ellos les faltan. Buscan afecto ajeno para superar el sentimiento de vacío, soledad o abandono, pudiendo llegar a ser personas dependientes.
Eneatipo 5- Rafiki: El investigador
El viejo y sabio Rafiki es un seguidor de la vida de Simba que trata de adivinar el futuro y cómo será la vida en el reino.
Como demuestra Rafiki, los eneatipo 5 son cerebrales, perceptivos, innovadores, reservados y aislados. Su mayor miedo es sentirse incapaces e inútiles. Siempre están en búsqueda de la inteligencia y son capaces de predecir el desenlace de una sucesión de eventos.
Les encanta aprender y aumentar sus conocimientos, convirtiéndose en expertos en algún campo. Son pensadores independientes, innovadores e inventivos, capaces de desarrollar ideas novedosas, originales y valiosas.
No les gusta depender de los demás, por lo que evitan los compromisos emocionales.
Eneatipo 6- Zazu: El leal
Zazu es el fiel seguidor de Mufasa. Los seis temen encontrarse perdidos, abandonados y desorientados, sin un guía o referente estable hacia el que poder dirigirse. Zazu encuentra en Mufasa una base segura que le aporta apoyo y seguridad.
Son trabajadores, leales y amistosos. Tienen mentes vigilantes y son muy indecisos, por eso buscan a alguien para que pueda orientarles.
Muestran preocupación por todo lo que les rodea y a menudo tienden a pensar en acontecimientos futuros catastróficos. Cuando están sanos pueden ser valientes y eficaces. Mientras que si están enfermos pueden ser cobardes, masoquistas y paranoicos.
Son los más temerosos dentro del Eneagrama. Las personas con esta orientación son especialmente conscientes de los peligros de la vida y están alerta a los riesgos que pueden acechar bajo las apariencias cotidianas.
Son muy trabajadores, responsables, leales y fieles. Lo más importante para ellos es su seguridad y la de los suyos.
Eneatipo 7- Timón: El entusiasta
Timón es un personaje orientado al placer de la vida, a la satisfacción del deseo a corto plazo. Acompañado por Pumba, son repudiados por el resto de los animales, sin embargo, palian su dolor complaciendo sus apetitos y viviendo en un paraíso en el que pueden comer todo lo que desean. Los siete controlan y subliman su dolor complaciendo sus apetitos.
Los pertenecientes a este eneatipo son entusiastas y agradecidos con la vida. Son extrovertidos, espontáneos, ambiciosos, divertidos y dispersos. Todo les parece excitante y vigorizador, cada estímulo produce una respuesta inmediata en ellos.
Muchos tienden a ser fuertes en comenzar una acción, pero débiles en la continuación.
Eneatipo 8- Scar: El desafiador
Scar niega la debilidad. Se ve a sí mismo como una figura fuerte, consumida por la venganza y la ira.
Dentro de este tipo de personalidad hay rabia y deseos de liderar a otros más débiles. Muestran su fuerza para conseguir lo que quieren y ejercer control en el otro. Son líderes naturales que suelen inspiran a los demás.
Cuando los ochos están menos sanos, su interés por el poder comienza a corromperse por intereses propios. Cubren sus vulnerabilidades con agresividad y fuerza.
Los eneatipos 8 más enfermos pueden ser recelosos, intimidadores, vengativos, crueles, como es Scar, motivado por su deseo de poder y rivalidad frente a su hermano, que consigue su objetivo, aunque suponga destruir al otro.
Eneatipo 9- Pumba: El mediador
A Pumba le gusta vivir en armonía junto con Timón, siguiendo su icónico lema “Hakuna Matata” al pie de la letra. Ambos personajes se muestran receptivos a su ambiente y minimizan su propia presencia, mostrándose afectuosos, modestos y muy confiados.
Los eneatipo 9 viven sin darle mucha importancia a sus necesidades y transmiten una vida sin conflicto. Son instintivos y tienen un punto de vista positivo en el presente, sin embargo, tienen una alta capacidad para priorizarse.
Buscan la paz, la armonía y la unión. Evitan el conflicto y si se da alguno tratarán de mediar y conciliar entre las partes. Muestran conformismo o sobreadaptación para conseguir una vida armónica y sin conflicto.
Psicoterapia La Sal
Psicólogos y Psicoterapeutas en Embajadores-Delicias (Madrid)