El Trastorno Obsesivo Compulsivo se caracteriza por la presencia de obsesiones y compulsiones.
Los psiquiatras y psicólogos ponemos la etiqueta de obsesiones a aquellas ideas, imágenes, temores, representaciones o impulsos que aparecen de forma espontánea y repetitiva en nuestra mente. El paciente con TOC sabe que dicho pensamiento, imagen, temor o impulso es inapropiado o absurdo, pero aun así le cuesta mucho trabajo evitar su aparición, que además suele ser recurrente. Estas “obsesiones” crean gran malestar y pueden ocupar mucho tiempo de sus vidas por lo que van deteriorando la calidad de vida (las relaciones familiares, sociales, académicas o laborales).
En el lenguaje corriente es muy común utilizar la palabra “obsesión” para referirse a distintas cosas, pero no todo es obsesión para nosotros… No son obsesiones las preocupaciones excesivas de la vida cotidiana (uno no se siente extraño con ellas, aunque pueden generar ansiedad, y son un intento de solucionar problemas reales a diferencia de las obsesiones que no pretenden solucionar ningún problema).
Por compulsiones entendemos aquellos actos, comportamientos o acciones mentales repetitivas que se suelen dirigir a reducir o prevenir el malestar generado por el pensamiento obsesivo.
Por ejemplo es normal mantener precauciones para no contaminarse o contraer enfermedades, pero si ya se convierte en una preocupación que aflora en nuestra cabeza constantemente, y lo tenemos que acompañar de lavarnos las manos 50 o 100 veces al día, ya se convierte en algo que nos está haciendo sufrir y para lo que estamos perdiendo tiempo que puede deteriorar nuestra calidad de vida.
También puede ser normal que nos asalten dudas de si hemos cerrado bien o no la puerta de casa o la llave del gas, y tengamos que volver a comprobar si lo hemos cerrado. Pero si persiste la duda en nosotros y tenemos que volver a comprobar 25 veces si es así, o interrumpir otras actividades, volvemos a encontrarnos con sufrimiento y malestar.
Las obsesiones más frecuentes giran en torno a temas diversos, así podemos encontrar:
– Obsesiones que giran en torno a enfermedades
o Temer entrar en contacto con factores que causen enfermedades (VIH, cáncer o enfermedades venéreas) como gérmenes, alimentos, etc.
– Obsesiones que giran en torno a la contaminación
o Temer contaminarse con productos químicos o sustancias perjudiciales para la salud
– Obsesiones que giran en torno a la suciedad
o Experimentar intenso malestar al entrar en contacto con productos corporales (heces, orina, sudor, saliva, eructos, etc.…), basura, animales, ropa u objetos sucios.
– Obsesiones que giran en torno a la agresión
o Temer agredir física o verbalmente a otras personas o a si mismo
– Obsesiones que giran en torno a la sexualidad
o Imágenes pornográficas desagradables, impulsos a desnudarse en público, dudas constantes y angustiosas sobre la sexualidad, etc.…
– Obsesiones que giran en torno al orden y la simetría
o Sufrir en caso de que no tenga todo colocado de determinada manera, o la necesidad de hacer en el mismo orden siempre una tarea
– Obsesiones que giran en torno al miedo
o Imaginarse que uno u otra persona puede estar en peligro
– Obsesiones que giran en torno a la duda (duda patológica)
o Sobre nuestra sexualidad, sobre la forma de comportarse, sobre si habremos hecho bien o mal
– Obsesiones sobre temas abstractos
o Cadenas de pensamientos que se repiten una y otra vez hasta que resultan desagradables
o Existencialistas, pasando horas dudando sobre el sentido de la vida o si ésta es real o ficticia
o Sobre filosofía o religión
o Sobre la forma de ser o comportarse
En cuanto a las compulsiones, las más frecuentes están dentro de los siguientes temas:
– lavado/limpieza/desinfección
o lavarse las manos 60 veces al día, tardar dos horas en ducharse, etc.…
– comprobación
o comprobar varias veces que hemos hecho algo o que no ha sucedido algo negativo o que no hemos cometido ningún error ni imprudencia
– orden/simetría
o tener que tener todo en bien colocado para poder trabajar o estar tranquilos
– repetición o contar
o números, oraciones, etc.… por ejemplo por temor a que algo malo pueda suceder.
– Acumulación
o Por ejemplo tener la necesidad de tener el garaje lleno de objetos inútiles
Como hemos contado anteriormente los pacientes con TOC ven afectada su área laboral y social, por lo que no solamente es un trastorno que frecuentemente se acompaña de ansiedad y depresión (antiguamente estaba incluido en el DSM IV dentro de los trastornos de ansiedad, aunque en el nuevo DSM V constituye una entidad independiente a los trastornos de ansiedad), sino que también puede afectar a los miembros de la familia y compañeros de estas personas.
En caso de que padezcas o conozcas a alguien con TOC te recomendamos que acudas o recomiendes acudir a un Psicólogo o Psiquiatra, puesto que hay tratamientos farmacológicos y psicoterapéuticos que pueden ayudarte a mejorar tu calidad de vida como está científicamente comprobado con numerosos estudios.
Si te apetece seguir profundizando en el tema bien porque te interesa o bien porque padeces dicho trastorno te recomendamos el libro Dominar las obsesiones: Una guía para pacientes de Pedro Moreno, Julio C. Martín, Juan García y Rosa Viñas. Y si eres más de películas te recomendamos la película Mejor Imposible una comedia dramática donde el famoso Jack Nicholson nos interpreta a un paciente que sufre dicho trastorno.
Psiquiatría Madrid