San Valentín es la fecha de los enamorados por excelencia. Es un día dedicado al amor y a las relaciones en pareja, en definitiva, se trata de recordar a la persona que más quieres y los motivos que han hecho que estés enamorado de ella.
No existe un secreto que nos asegure el amor incondicional y para siempre de nuestra pareja, pero sí hay ciertas actitudes que pueden ayudar a tener una relación saludable. Es completamente normal que nos encontremos con obstáculos durante la relación que surgen por diferencias entre las dos personas. La actitud de ambas partes ante esta situación es esencial no sólo para resolver los desacuerdos, sino para que se consolide la relación en un futuro.
Tener una relación de pareja es mucho más que tener una persona que te haga compañía y con la que disfrutes de momentos en común. Se trata de compartir una serie de valores y encontrar a la persona que te complemente. Para que una relación funcione, es importante conocerse mutuamente, pero también hay ciertas actitudes que pueden ayudar a tener una relación de pareja saludable:
- Tener una buena comunicación. Tan importante es comunicar lo que nos gusta como aquello que nos desagrada. Muchas discusiones de pareja comienzan cuando no se es completamente sincero con la otra persona y nos callamos determinados detalles o actitudes que no nos han gustado. Hablar con tu pareja sobre cómo te sientes hace que se fortalezca la relación y se cree un clima de confianza al expresar tus sentimientos.
- Una relación basada en el respeto y la confianza. En una buena relación de pareja, ambas personas confían en que la otra parte no le va a engañar y no piden justificaciones de sus actos. Hay que querer a las personas tal y como son, entendiendo que no siempre van a actuar como nosotros queremos.
- Invertir tiempo juntos. Compartir actividades, hobbies o intereses comunes hace que se vaya creando un proyecto de vida en común. Para que una relación de pareja funcione es necesario invertir tiempo y dedicación en la otra persona y crear momentos juntos.
- Tener momentos de intimidad. Pasar tiempo a solas crea vínculos emocionales entre las dos personas que, a la larga, forjan la relación. Permiten conocer en profundidad a tu pareja y es una manera de demostrarle que realmente te interesa, pues te apetece invertir tu tiempo en conocerle mejor.
- Tener empatía. Practica la escucha activa con tu pareja y no interpongas a la fuerza tus creencias y necesidades por encima de las suyas. Trata de ponerte en su lugar y comprender su situación. La comunicación con nuestra pareja mejora considerablemente practicando la empatía.
- Respetar el espacio del otro. En una relación de pareja es importante respetar la intimidad de la otra persona y entender que tiene que tener sus momentos de independencia.