La codependencia es una condición psicológica en la que la persona manifiesta una excesiva preocupación por las dificultades de alguien más, generalmente por su pareja, pero puede ser un familiar o un amigo.
El otro día hablábamos de la dependencia emocional. La codependencia es una modalidad importante de dependencia emocional y se entiende como la dependencia establecida mutuamente en una relación con la otra persona.
La codependencia consiste en estar total o casi totalmente centrado en otra persona en lugar de estarlo en uno mismo, ya que el codependiente suele olvidarse de las necesidades y satisfacciones propias.
Las relaciones codependientes implican un grado de aferramiento que no es sano, donde las personas pierden su autonomía. La razón por la que dos personas permanecen en una relación de este tipo es porque ambos tienen la idea de que tienen que tener a esa otra persona en su vida para ser felices.
La codependencia también puede ser un conjunto de conductas de inadaptación aprendidas por los miembros de un grupo para sobrevivir en un ambiente de tensión y pena emocional causada, por ejemplo, por una pérdida, violencia intrafamiliar, alcoholismo u otra adicción. También existen cuadros de codependencia en situaciones no extremas.
Síntomas y tratamiento de la Codependencia
Algunos síntomas de la codependencia son presentar una conducta controladora, desconfianza, perfeccionismo, evitar hablar de los sentimientos, problemas de intimidad, comportamiento protector, hipervigilancia o malestar físico debido al estrés.
Generalmente la codependencia va acompañada por depresión, ya que el codependiente sucumbe ante sentimientos de frustración o tristeza extrema por su incapacidad de realizar cambios en la vida de la otra persona y puede llegar también a producir ataques de pánico.
Las personas que sufren codependencia pueden buscar asistencia a través de varias terapias. Una de los posibles abordajes que puede tener la codependencia es la psicoterapia gestalt para promover cambios en el comportamiento.